Una de las tareas más frecuentas que debemos encarar a la hora de realizar cualquier actividad o reparación en puertas de interior o cualquier otro objeto de madera es el taladrado.
Si bien practicar un orificio en madera no es nada difícil, hay que aprender la manera más adecuada para conseguirlo sin que luego nos plantée problemas adicionales el atornillado subsiguiente.
Tipos de brocas
La broca es una pieza metálica de corte de perfil helicoidal que crea orificios vinculada a una herramienta manual o automática que le procura el movimiento giratorio.
Las brocas te permiten perforar distintos tipos de materiales. La elección de una u otra variará según vayamos a cortar vidrio, hormigón, madera, metal, etc.
Las que sirven para trabajar en puertas de interior y otros elementos en madera son de varios formas, tamaños y materiales, según la tarea que estas desempeñan:
- Helicoidales: Las más comunes, formadas por un vástago para su sujeción y un tramo de corte helicoidal bien afilado.
- Largas: Se utilizan para cuando no se puede llegar a hacer el agujero con una broca de tamaño normal.
- De 3 puntas: Consta de una punta central, para centrar la broca, y dos laterales que van cortando en un circulo perfecto.
- Avellanadoras: Para embutir en la madera tornillos de cabeza avellanada.
- De paleta: Con una punta muy afilada que sirve de guía y una paleta que hará el agujero calibrado de acuerdo a su diámetro.
La máquina de taladrar
A la hora de taladrar puertas de interior y otros elementos en madera exsten máquinas manuales pero lo que no debe faltar nunca a una persona que empieza en estas labores es un taladro eléctrico cuya velocidad de giro se regule con el gatillo, que sea reversible con giro de izquierda a derecha y de derecha a izquierda, de potencia media ( a partir de 500 watios) y de calidad general media-alta.
Cómo taladrar puertas de interior y otros trabajos en madera
A la hora de practicar orificios puertas de interior y otross elementos en madera, no debemos olvidar:
- Utilizar gafas de protección, para evitar la introducción de virutas en los ojos.
- Mantener la máquina perfectamente sujeta y sin forzarla. Siempre perpendicular a la superficie de lo que pretendemos taladrar.
- Hay que sujetar firmemente la pieza a trabajar. Las piezas pequeñas (chapas, láminas, tablillas) deben asegurarse mediante gatos a la estructura sobre la que trabajamos para evitar giros en la penetraciónd e la broca.
- Debemos apagar y desenchufar la máquina cada vez que cambiamos una broca o efectuamos la limpieza de la misma.
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