Las puertas de interior y exterior de las viviendas suelen decorarse también en estas fechas con llamativos motivos navideños. Como de costumbre, podemos optar por adquirirlos en cualquiera de la infinidad de tiendas que venden adornos tradicionales preparados para colgar o, si eres aficionado al DIY, probar con algunas de las sencillas y decorativas ideas que te proponemos a continuación.
Corona de Navidad con guirnalda
Uno de los adornos navideños más típicos de las puertas de interior y de exterior son las coronas de Navidad que, desde hace años, se colocan en la puerta principal de acceso a la vivienda como una forma de agasajar a nuestros visitantes unos instantes antes incluso de haberla franqueado.
Celtas y romanos ejercían un uso místico de coronas y ramas de acebo y laurel como símbolo de honor y protección en la conmemoración de fiestas y en la celebración de rituales. Con la llegada del cristianismo, la corona adquirió distinta simbología, pero mantuvo su popularidad sobre todo en el periodo de Navidad como costumbre de reflexión espiritual para representar una luz en los meses más oscuros del invierno.
Aquí tienes un buen ejemplo de corona con guirnalda:
Un muñeco de nieve para las puertas de interior
Uno de los personajes principales en la Navidad de los países cuyo clima es propicio para ello, es el muñeco de nieve. La construcción de este tipo de muñecos es un entretenimiento invernal infantil en las latitudes de la cultura occidental donde abunda este elemento.
Su diseño habitual, a base de grandes bolas de nieve en las que se definen de forma más o menos similar las características humanas (rasgos faciales en la parte superior, botones en el pecho y ramas para formar los brazos en los laterales), es fácilmente reproducible encima de las puertas de interior blancas a base de pegar determinados elementos sobre su superficie.
Corona de Navidad con materiales reciclados
A partir del siglo XV, la tradición de la corona navideña se extendió por todo el mundo cristiano. Los peregrinos ingleses y holandeses la llevaron al Nuevo Mundo donde se incorporó como un elemento más de la colonización y floreció espectacularmente, aunque cambiando de estilo. Cada país, finalmente, ha adaptado el diseño de tan popular adorno a su propia idiosincrasia personal hasta convertirlo, en nuestra civilización occidental, en uno de los símbolos más característicos de la temporada navideña.
He aquí un segundo ejemplo de corona más actual, elaborado a partir de materiales reciclados.
Desde puertasoline.es , empresa de referencia en la decoración en madera en Madrid desde el año 1970, les deseamos una Feliz Navidad y un Próspero Año Nuevo.